La gestión del inventario disponible es un pilar fundamental para cualquier empresa que busca mantener un flujo operativo eficiente y maximizar sus ventas. Este proceso implica monitorear, registrar y optimizar los niveles de productos disponibles en almacén o puntos de venta, asegurando que siempre haya suficientes existencias para satisfacer la demanda sin caer en excesos que generen costos innecesarios.

¿Qué es el inventario disponible y cómo se realiza?

La gestión del inventario disponible es más que contar productos en estanterías; se trata de un sistema estructurado que combina tecnología, procesos y análisis. Este se realiza en tres etapas clave que son:

1. Registro de inventario: Consiste en contabilizar de manera precisa todos los productos existentes. Esto puede realizarse de forma manual o, preferentemente, mediante sistemas digitales como software de gestión de inventarios (ERP). La periodicidad dependerá de la industria y el volumen de operaciones, pero lo ideal es realizar un levantamiento inicial completo y revisiones periódicas (diarias, semanales o mensuales).
2. Análisis de rotación: Conocer qué productos tienen mayor o menor movimiento permite clasificar los artículos en función de su importancia (método ABC) y prever qué productos necesitan reabastecimiento prioritario.
3. Planificación y optimización: Con los datos en mano, se establecen estrategias para evitar tanto la ruptura de stock como el sobreabastecimiento. Esto incluye calcular puntos de reorden, establecer mínimos y máximos y ajustar la frecuencia de pedidos según la demanda proyectada.

¿Cuándo se realiza el inventario disponible?

El momento adecuado para gestionar el inventario depende de factores como la temporada, el tipo de negocio y los picos de ventas, dependiendo el giro de tu negocio puedes decidir realizar la gestión del inventario. Por ejemplo:

• Pretemporadas clave: Antes de campañas como Navidad, El Buen Fin o regreso a clases, es fundamental hacer ajustes para anticipar el aumento en la demanda.
• Inicio y cierre de año: Un conteo físico al inicio y final del año permite auditar resultados, detectar mermas y planear estrategias para el nuevo ciclo.
• Mensualmente o según rotación: Empresas con alta rotación de inventarios, como supermercados o minoristas, necesitan revisiones más frecuentes que aquellas con productos de menor movimiento.

Impacto en las ventas del inventario disponible

Una buena gestión del inventario disponible tiene un impacto directo en las ventas. Aquí algunos puntos clave:

• Mayor satisfacción del cliente: Cuando los productos están disponibles al momento que el cliente los necesita, la experiencia de compra mejora y aumenta la recomendación y fidelidad hacia la marca.
• Reducción de pérdidas por obsolescencia: Mantener un control estricto evita que los productos caduquen o queden fuera de temporada, protegiendo las utilidades.
• Optimización del flujo de caja: Conocer la demanda real permite invertir únicamente en los productos que tendrán rotación, evitando que el capital quede inmovilizado en inventarios excesivos.
• Decisiones estratégicas de ventas: Con un inventario bien gestionado, es más fácil planificar promociones, liquidaciones o estrategias para deshacerse de mercancía de bajo rendimiento  evitar tenerlas de manera frecuente.

La gestión del inventario disponible no es solo una práctica operativa; es una estrategia competitiva que puede marcar la diferencia en un mercado saturado. Implementar herramientas tecnológicas, procesos claros y revisiones periódicas permite a las empresas mantenerse ágiles, competitivas y preparadas para satisfacer las necesidades de sus clientes en cualquier momento y hacer una adecuada planeación de la demanda.

Contar con el producto adecuado, en el lugar adecuado y en el momento adecuado puede ser la diferencia entre ganar o perder una venta. Por eso, invertir en la correcta gestión del inventario no solo optimiza costos, sino que impulsa el crecimiento sostenido del negocio.